Cerrado ya el 2021, si echamos la vista atrás podemos decir que en los últimos tiempos hemos tenido un poco más de lo mismo: lucha contra la pandemia.
Si bien es cierto que es lo que nos ha tocado, no lo es menos que este 2021 tampoco ha sido un año fácil para el turismo.
Un sector tan dependiente, como sabemos, de la libertad de movimiento y la globalización.
A pesar de las dificultades, empresarios y viajeros han ido adaptando procedimientos y formas de consumo a las restricciones y requerimientos del momento.
La buena noticia es que parece que el nuevo año se nos presenta con un enfoque bien distinto.
Y un reto: comenzar el trabajo hacia una nueva realidad.
Las 10 tendencias que dibujan el nuevo año: su impacto en el turismo
Según The Economist son 10 las tendencias a nivel mundial que tendrán un impacto directo y marcaran los próximos 12 meses a nivel global.
Vamos a verlas:
#1 Democracia frente autocracia
El tradicional enfrentamiento entre Estados Unidos y China deja dos escenarios completamente opuestos en lo que al gobierno de una nación se refiere.
No solo se verá acentuada esta situación en temas comerciales, sino en aspectos como las vacunas, la tecnología o las estaciones espaciales.
Seremos testigos de cuál sistema político maneja mejor la nueva realidad y el despegue turístico con cuestiones claves como la gestión de la movilidad de viajeros una vez finalizada la pandemia.
#2 La Covid-19, una enfermedad endémica
Todos los pronósticos apuntan que la Covid-19 se convertirá en una enfermedad endémica como otras tantas a lo largo de la historia.
Aunque cabe destacar que seguirá siendo un problema de gran importancia en los países en vías de desarrollo donde la vacunación, por desgracia, está tardando y mucho en llegar.
Ante este panorama surge la duda de cómo se gestionará la entrada de turistas a estos países con destinos muy atractivos para el viajero que huye de las masificaciones.
#3 La inflación, una preocupación al alza
A estas alturas de la pandemia la subida de productos y servicios es un hecho más que contrastado.
Aunque los bancos tratan la situación algo puntual, parece que algunos países lo van a tener más complicado que otros.
Es el caso del Reino Unido, que tiene todas las papeletas de sufrir una inflación constante debida al estancamiento de su economía por:
- falta de mano de obra como consecuencia del Brexit;
- y la dependencia del gas natural.
Esta situación afectará de lleno a la actividad turística de nuestro país, principal receptor de viajeros británicos.
#4 El teletrabajo
Sin duda alguna, una de las muchas enseñanzas que nos llevamos de los meses de confinamiento es que hay un buen número de trabajos que se pueden realizar desde casa.
Una nueva tendencia que necesita, claro está, de normativas laborales y fiscales que garanticen un seguimiento real del trabajo en remoto.
Por otro lado, parece que la brecha de género laboral se mantiene al señalar a las mujeres como las más reacias a volver a la oficina.
¿Será este un nuevo motivo de discriminación hacia las mujeres a la hora de optar por puestos con mayor poder de decisión?
#5 El techlash
Es la unión de technology y backlash y se traduce como un rechazo al poder acumulado y excesivo que ostenta los gigantes de mundo de las tecnologías.
Estados Unidos y Europa llevan intentando regular esta situación años, pero aún les queda un largo camino para intervenir en el crecimiento y ganancias de estas empresas.
Por su parte, China ha puesto en marcha en los últimos tiempos un plan de ataque contra las grandes empresas de tecnologías, con exigencias centradas en fomentar la investigación geoestratégica y no tanto en lo que consideran vanidades como los juegos y las compras (viajes incluidos).
#6 Las criptomonedas ganan peso
Y es que se están colando cada vez más y con mayor confianza en los monederos digitales de los usuarios.
El resultado de todo este embrollo financiero es una guerra por el futuro de las finanzas a tres bandas:
- bancos centrales.
- empresas tradicionales de tecnología.
- las innumerables criptomonedas que aparecen (y desaparecen) casi por arte de magia, el blockchain y las finanzas descentralizadas.
#7 Crisis y cambio climático
Tras la pandemia ha quedado demostrado que si la naturaleza se tambalea, todo caemos.
Lo peor es que los gobiernos siguen haciendo oídos sordos a los avisos del planeta.
En los últimos años vemos cómo de manera más frecuente se dan casos de incendios forestales, inundaciones y olas de calor que son una muestra inequívoca del cambio climático al que nos enfrentamos.
Una crisis climática que puede llevar, en un futuro no tan lejano, a la desaparición de muchos destinos turísticos.
#8 La recuperación del turismo
Los datos reflejan que los números de la actividad turística en 2019 aún quedan lejos.
Y una cosa está bien clara: la mitad de los viajes por negocios no volverán a producirse.
Una situación que si bien es positiva para el planeta no lo es tanto para la industria turística, que ve perder el segmento que históricamente equilibraba los precios hacia unas tarifas más competitivas.
#9 La revolución espacial ha llegado
Todo apunta a que 2022 será el año en el que más turistas irán al espacio.
China tiene previsto finalizar su estación espacial. El mundo del cine se están plateando realizar películas en gravedad cero. La NASA planea estallar una sonda espacial contra un asteroide.
Está claro que en la Tierra hay mucho interés por conquistar el firmamento. ¿Serán los viajes al espacio una realidad al alcance de cualquier viajero?
#10 El deporte borra fronteras
Los grandes eventos deportivos son en muchas ocasiones buenas oportunidades para acercar posturas entre países enemistados.
En 2022 nos esperan dos citas muy importantes: los Juegos Olímpicos de Invierno en Beijing y el Mundial de Fútbol en Qatar, ambos dos anfitriones con muchas protestas en contra.
Veremos si estas citas sirven para limas asperezas a nivel internacional.
Sea como sea, lo que sí parece meridianamente claro es que la nueva realidad del turismo está llegando en este 2022.
Una nueva forma de vida que afecta a los deseos, preferencias y necesidades de unos viajeros en cuyas manos está, en parte, la recuperación del sector en este nuevo año.